lunes, 8 de septiembre de 2008

Internación 3


Difícil es contar o difícil es pensar.
Aquellas cosas que se pasan rara vez se repiten, o se pueden volver a contar como aquella vez. Tengo la imagen de Elina y Juan en casa, entre picaditas y amor de todo ese tiempo que pasó desde el casamiento de ellos dos, que dificultoso fue chicos, que casi ni pude volver a escribir el blog, que no los pude saludar y que mas aún, no pudimos ir con Luna a la fiesta de ustedes dos.
De solo pensar en el vértigo de vuestros amigos ..., me quiero recostar en esa imagen de fiesta y dejarme llevar, tapar esta otra de Lunita otra vez internada.
Tengo mas imágenes que me arremolinaron las lágrimas de una a otra mejilla sin dejarme esconder, mientras sacaba fotos para Manuel, para los primos que ayer festejaron entre mas primitos y mas chicos, sólo vi parte de ese video y de sólo pensar que de una foto a otra Luna aparecería las manos me temblaban, el corazón se dilataba de tristeza y mientras apuntaba no se donde, con la cámara tapaba mi angustia de no poder verla por allí, con su mamá y los demás.
En casa las cosas estaban mal, desde hace días que Luna había perdido su sonrisa a cambio de tos, fiebre, ojos cansados, llanto, dolor y un congestionamiento que no la dejaba respirar.
Loreley, Gastón, todos hicieron lo que nadie hace, sino es por amor, ellos lo tienen y lo entregaron, lo demostraron sobradas veces y esta vez fue una mas. Pero no se pudo esta vez.
Así fuimos a la clínica entregados a que la situación nos estaba doblegando, y así quedamos internados, una nueva vez. Hoy Luna está en Palermo, en la Trinidad, en la habitación lindera a la que anteriormente tuvimos, la 121.
Responde, y como siempre hasta su último llanto viene de soportar tanta adversidad, cansada, enojada, fastidiosa, y esperando volver a salir de esta, con la fortaleza que sólo conozco personalmente de ella. Gracias a todos los que mandan saludos fuerza y ánimo, tanta energía nos deja respirar. Gracias Sandy, por tu compañía y también por tu valor. Mónica, tu regalo para Luna me emociono, nunca había imaginado un regalito así para ella, es todo un honor, y además una belleza.
A Ceci, Gaby, a los abuelos y a los profesionales que llaman para preguntar por ella sólo un gran abrazo, es lo que mas tengo para hoy, y algunas palabras. Luna volverá a casa pronto, están desde ya invitados a venir.

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