martes, 6 de abril de 2010

Mascarón de proa



Casi siempre recuerdo las películas en donde uno del grupo se separa, mientras el resto le aconseja seguir con el montón. Las imágenes de todos estos días pasan como tornados, se detienen como en estaciones en donde las vías están cortadas, nadie explica los porque, nadie lo sabe, solo leen los periódicos que muestran la foto del óxido, del corte, del pasto crecido mas allá...


Los murmullos constantes hacen de cuenta que todos saben, y en la soledad de casa se acumulan deseos, logros y frustraciones, sin embargo, entre las mareas de los océanos ese pequeño velero sigue y sigue, con golpes, con algunas velas caídas, con el mascarón de proa gritando descarriado nuevos caminos, cortando el viento, la corriente y recordando las vías cortadas del pasado, mientras todos miraban.


Si todo este camino lleva a vos lo andaría hasta el fin de mi cuerpo, de mis días.