Hay amigos que
tuvimos todos los días, de toda la vida, ayer y en estos días estuvieron en
casa, nunca les había visto la cara, quizás apenas. Hay amigos que nunca
supieron de caminos, ni climas, ni motivos que impidieran cantar una canción cuando
ese momento es quizás cuando el alma no puede caer más. Sosteniendo las nubes rodearon esta casa, soplaron, cantaron,
callaron…casi apenas que no se fueron, casi apenas que no estuvieron, casi que no
los conocía, no sabía, pude abrazarlos, pude tenerte un poquito en cada uno.
Lunita, estos días
me viste triste, pero las personas a veces tenemos que aclarar nuestro espíritu,
sólo nos conmovemos, libros, amigos y conocidos nos ayudamos para entender
mejor la vida, nos sorprendemos y también extrañamos, allí dejamos caer lágrimas
y madre mía! Cuantas alegrías. Entendemos poco de la mayoría de las cosas,
queremos hacernos que si entendemos…pero no. Esa impotencia nos deja un poco
angustiados, cuando no podemos resolver las cosas, cuando vemos que no podemos
llegar al infinito, como ese amor que nos regalaste, cuando no podemos abrazar
la sombra y cuando los perfumes siguen sus caminos sin que podamos
retenerlos. Hablamos de la vida Lu, no
son perfumes, ni sombras, son sensaciones, son voces, son despertares a la
mañana, son tiempos del día que sobran, los silencios inoportunos…por eso los
hombres nos conmovemos, no es que seamos muy tontos…somos frágiles y después nos
hacemos duros por un pinchazo en una clínica, como si nada sucediera…debíamos
aprender de vos tantas cosas..Vos tenías razón en llorar por eso y no por las
sombras y los aromas.
No importa Lu, ya
voy a poder crecer un poco mas, vos hace tu camino que yo sigo con este
rompecabezas que dejaste sin armar, están un poco mezcladas la piezas porque
son varios rompecabezas…en fin, nunca ordenaste tus cosas y ahora entiendo porqué,
cuando vuelvas no te asustes si no pude terminar, soy un poco lento, pero vos
tranquila, juga y divertirte, ya sabes ser feliz y contale a Benicio que es
verdad que tenès muchos juguetes en donde estás, él estaba preocupado porque desde acá no los veía.
Habrás notado que te
mandamos muchos globos, uno con forma de Luna y todos empapados de amor, fuè luego
de que mamá tocara el violín y todos para vos, mientras jugabas con los dos
muñequitos bailando como la vez que los chicos del cordal tocaron en aquel
lugar, era muy gracioso ver como ellos tocaban y te miraban a vos como hacías danzar
a tus muñecos al compás de la música. Esa mamá que tenès, suerte que te pareciste
a ella, parece tan vulnerable a veces, sin mediación ni preámbulo alguno se
puso el violín al hombro y no había ni sombra ni perfume ni huracán que pudiera
con su solidez, contundencia y corazón, mas firme que nunca, tocaba ella y
todos debimos verla sin una làgrima en medio, yo también te veía a vos, danzando
otra vez con los muñequitos entre tus manos como aquella vez..aún me cuesta
dimensionar que familia que pude abrazar, mamá Sandra y vos, y yo tratando de
contar de tamaña sensación.
Ayer nos abrazamos,
y te mandamos mensajitos para que tengas por algún lugar del alma, igual se que
no lo vas a ordenar, no importa, alguien seguro que se va a ocupar, al menos de
dejar sabiamente las cosas de la vida en su lugar, sino no podríamos continuar
no? Lo mismo pasa acá Lu, nos creemos muy ordenados porque el piso está limpio
y la ropa doblada, pero no, ahora veo que ese orden no se parece al tuyo, que
hay mas para aprender de vos...
Más tarde te sigo
contando, pero chiquita, hay amigos que se pusieron a escribir, te dedicaron
algunas cosas, las pensaron para vos, algunos con una espantosa letra, pero los entendimos igual con mamà, Otros lo hicieron en mails o acá mismo,
en tu blog, ahora me voy un rato, luego te los paso.