martes, 30 de noviembre de 2010

Mundo Mago

Allá lejos, en el mundo de los magos, donde todo se desenvuelve según los deseos hay una grieta que deja su cauce a este mundo mas cercano, donde los sueños apenas se dejan ver por esas endijas, espiando por las noches, otras pocas de día.
  En ese lejano mundo ellos sólo ven lo que necesitan, y su abundancia deja caer sobre nosotros algo de tanta magia, la que de algún modo nos empapa con algo de su brillo. Será quizás que para que exista la magia es necesario conocer las imposibilidades? Como disfrutaríamos del día si no supiéramos de la noche, como de la alegría si no conociéramos la tristeza, como habría naturaleza si no hay dos polos… norte sur, positivo negativo. Y la magia?, los milagros? Donde disponen sus polos, donde los vemos? Quizás inmersos en tanta velocidad aprendimos que es mejor dejarlo ir, nos equivocamos de prioridades algún día, y hoy padecemos esa falta de agudeza que los magos disponen para sus mundos. Es que ese mundo está dentro.
    El mundo de los magos fluye burlando nuestra torpe mirada, tropezamos con ellos y sólo pensamos en veredas mal trazadas, sonidos, luces, cosas que aparecen y desaparecen, son el mundo de lo que no nos importa, días alegres que no se explican, recuerdos que son el aroma de décadas pasadas, momentos que parecían agendados… son las ventiscas que parecen al oído mientras pasa el día, venidas de ningún lado. Son esas miradas que vienen de tus ojos, cuando estoy perdido y que encuentro sin querer, atrapando mí despilfarro.  La magia viene con el cantar de cada vez que pienso en ella, las mañanas que amanecían sin querer, sin necesidad mas que la de mostrar las olas del mar, alabando, reverenciando habernos amado a sus pies. Esa magia la conservo y se concentra en una lágrima, magia del mundo que supo armar esos momentos.
   Los magos susurran pero no repiten el momento, lo hacen una vez, por eso es necesario estar atento, no vuelve a pasar y si avisan… es porque el momento pasó. No hay que detener esos momentos, sólo hay que abrir los ojos, el corazón y latir ese puñado de cosas, porque de otro modo de diluyen sin volver. Serán parte de la memoria y las cosas que nunca pudimos hacer.
   

1 comentario:

Grace & Pato dijo...

Luni!!! qué papá mago tenés!! mago de las palabras y a la caza continua de esas imágenes que se le escapan a la mayoria de las personas. Divina la foto, divinas las modelos y un sol el que la captó para llevarlas hasta la eternidad.

Besos y Abrazos a los tres!